jueves, 29 de agosto de 2019

Los 33 cuadros regresan a Los Pinos




La Colección de pinturas de la residencia presidencial Los Pinos, comisionada por Carlos Salinas de Gortari en 1993, “no volverá a ver la sombra. Tendrá divulgación y posibilidades de viajar”, aseguró la secretaria de Cultura federal, Alejandra Frausto, en la inauguración el miércoles 28 de agosto de la exposición De lo perdido, lo que aparezca: 33 visiones de la pintura en México en la Casa Miguel Alemán del ahora Complejo Cultural Los Pinos (CCLP).


El conjunto de 33 cuadros exhibido en el CCLP, pertenece al acervo de Presidencia de la República, instancia que lo ha puesto en custodia de la Secretaría de Cultura federal. En el acto Frausto anunció que “a partir de ahora la colección enriquecerá el acervo del Museo de Arte Moderno (MAM), al ser su destino natural”, dado el periodo en cuestión.


La funcionaria también informó que los 33 cuadros itinerarán por el país, en especial a los estados de los que provienen algunos de los artistas. Entrevistada al término del acto, Frausto dijo que actualmente estudian “los museos y recintos que nos pueden recibir”. Esta itinerancia podría incluir un viaje fuera del país, agregó.



Frausto contó la historia de la búsqueda de la Colección: “En la época de transición (del nuevo gobierno) Francisco Toledo me mandó una carta de su puño y letra en que decía que había pintado un cuadro que era parte de una colección de 33”. El artista juchiteco también le envió una copia del catálogo original para facilitar la búsqueda. Los cuadros fueron localizados en una bodega de la avenida Constituyentes.


El siguiente paso consistió en ver en qué condiciones estaban las pinturas. Aunque estuvieron embaladas, “literalmente desempolvamos esta Colección. Hubo que hacer algún trabajo que duró algunos meses. Me comuniqué de nuevo con el maestro Toledo, por escrito y a mano. Dije, ya está lista la colección y queremos exponerla en Los Pinos. Le pedí un título y es él quien nombra esta exposición. No es un secreto que había muchas cosas en esta gran propiedad que ya no están”.



Al acto celebrado en la Casa Miguel Alemán asistieron varios de los artistas con obra en la Colección como Manuel Felguérez, Vicente Rojo, Luis López Loza, Rafael Cauduro, Irma Palacios, Miguel Castro Leñero, Roberto Cortázar, Eduardo Tamariz y Germán Venegas. La poeta Natalia Toledo estuvo en representación de su padre Francisco Toledo. Acudieron familiares de Luis García Guerrero, Luis Nishizawa, Rafael Coronel y Julio Galán.


Manuel Felguérez, al hablar a nombre de sus compañeros, dijo que “la exposición es un regalo que nos da el actual gobierno de México porque nos proporciona un público”.


Preguntada sobre el envío de las obras al MAM, Natalia Pollak, su directora, dijo “me acabo de enterar, sin embargo estoy muy contenta. El MAM es su lugar natural, sin duda. El acervo está representado por casi todos los artistas y seguirá creciendo con esta fantástica noticia. Tenemos una bodega con espacio, sin embargo iremos viendo en dónde se va a resguardar, con todas las normas de conservación”.


Al término del acto varios cuadros, entre ellos los de Vicente Rojo y Luis Nishizawa, fueron trasladados del pasillo donde se habían colocado, a un lugar con mayor visibilidad.



martes, 27 de agosto de 2019

20 años sin Alberto Gironella





El pasado 2 de agosto se cumplieron 20 años del fallecimiento del pintor Alberto Gironella (1929-1999). Por ese motivo el historiador del arte Esteban García Brosseau impartió la conferencia Alberto Gironella: esperpéntico surrealista novohispano en el Museo Fernando García Ponce, en Mérida, Yucatán, atento a los artistas de la Generación de la Ruptura, a la que perteneció el recordado.


Si García Brosseau emplea el término “esperpéntico surrealista novohispano”, es porque “estos tres aspectos están presentes en la obra de Gironella de manera indisoluble. Lo esperpéntico forma parte de de este modo de hacer literatura que es propio de Ramón Valle Inclán, a quien admiraba, en la que se distorsiona la realidad a la manera de un espejo deformante. El mismo hablaba de su relación con esta forma de describir la realidad que también está ligada a su relación con a la literatura y la realidad española que tiene su lado un poco grotesco que vemos, por ejemplo, en la pintura de Velázquez o de Goya, pintores que admiró mucho”.


A García Brosseau le interesa el movimiento de la Ruptura –es hijo del pintor Fernando García Ponce-- , así como la relación “polémica” de Gironella con el surrealismo. Entrevistado, reconoce que Gironella tiene “una relación ambigua con el movimiento surrealista. A pesar de estar muy orgulloso de conocer a André Bretón y enojarse con Teresa del Conde quien decía que sólo lo conocía de manera superficial, además de que su relación con el surrealismo era la que tenían los artistas de la segunda generación, también decía que lo suyo iba más allá y más bien era con el barroco. Aunque sea ambigua, me parece que sí hay en algunos objetos de Gironella ésta relación con lo simbólico, típico del surrealismo”.


Para García Brosseau hablar de cierto olvido de la obra de Gironella en años recientes –destaca la labor hecha por su hijo Emiliano en promoverla--, esto tiene que ver con “cierto olvido en que está la Ruptura a través de cierta ideología que se mantiene, por ejemplo, en el Instituto de Investigaciones Estéticas, donde se quiere finalmente volver a dar más importancia a la cuestión del muralismo paradójicamente. Es cierto que hay personas como Manuel Felguérez que están muy en boga, sin embargo hay otros pintores de la Ruptura que están olvidados”.


Profesor de posgrado en la Universidad Nacional Autónoma de México, con especialización en arte colonial, el entrevistado agrega que “a nivel internacional los que cuentan más en la pintura mexicana son los muralistas y, no se diga, Frida Kahlo”.


Ya que Gironella tuvo una relación directa con Bretón, quien lo reconoció como un artista relevante, García Brosseau insiste en su relación con el surrealismo: “Parece que uno quisiera olvidar la relevancia que tuvo el surrealismo en México y la relación que tuvieron sus artistas aquí con la Ruptura. En general se trata de dos movimientos distintos cuando en realidad estaban en contacto. También existe una especie de injusticia con respecto del surrealismo porque si bien se dice que la Ruptura fue el movimiento que rompió con el muralismo, eso también fue posible por la presencia de los surrealistas aquí. Ambos compartían el deseo de pintar libremente lo que querían”.



domingo, 11 de agosto de 2019

La Galería Acapulco 62 tiene nuevo local




La Galería Acapulco 62 estrenó un nuevo local, más reducido, ahora en la colonia Santa María la Ribera, después de abrir sus puertas en febrero de 2018 precisamente en la dirección que le da nombre, en la colonia Roma. Lo ha hecho con Impresentables nacionales a todo color. 1era temporada, exposición del pintor Franco Aceves Humana.

Acapulco 62 es una iniciativa de los pintores Boris Viskin y Alfonso Mena Pacheco. ¿Por qué abrir una galería de arte? Para Mena Pacheco “nuestro interés era conjugar las divisiones que en nuestra época había de pintura e instalación. Hemos hecho eso, además de promover lo que consideramos buen arte, aparte de lo nuestro. Conjugar eso como un espacio cultural que ayude a la comunidad”.

La galería, ubicada frente a la Alameda, sí la del Kiosko Morisco, está pensada como un espacio abierto con la esperanza de que “entren muchas personas”. Según Viskin, es muy necesario que la obra se vea: “Me importó mucho mi exposición individual en el Museo de Arte Moderno por la experiencia de que el público vea tu obra”.



La Barbie (2018), óleo, de Franco Aceves Humana



La serie Impresentables nacionales, de Aceves Humana, está como mandado hacer para el espacio alargado y angosto de la pequeña galería. Se trata de 22 retratos hechos al óleo de políticos, figuras públicas y delincuentes, selección basada en las “fobias personales” del artista. ¿Por qué pintar personas como, por ejemplo, Marta Sahagún o Carlos Romero Deschamps? “Todos me caen muy mal, los detesto, me parecen impresentables. Al pintar los cuadros decía, éste cabrón lo tengo que hacer. Hasta me divertí porque salen feos como son, abominables”.




Romero Deschamps (2018), óleo de Franco Aceves Humana




Aceves Humana se basó en fotografías de prensa que encontraba y luego modificaba. Un poco escogía el encuadre. Su paleta consta de tres colores –un azul, un amarillo y un rojo-- y negro. “No los mezclo. Aplico un color y encima el otro. Tienen esa cosa para hacerse transparentes. Estos tres colores se van sumando y crean otros que no son puros. Sólo para los fondos y los trajecitos de los güeyes usaba otros colores. Sin embargo, todas las caras están hechas con los tres colores básicos. Uso unos pigmentos muy prendidos”.





Marta Sahagún (2019), óleo de Franco Aceves Humana




El entrevistado tiene otra serie de retratos de pintores, así como naturalezas muertas, que exhibirá en octubre próximo en la Galería 526, espacio del Seminario de Cultura Mexicana. Apenas cultiva el retrato desde hace dos años. Los pintores en sus retratos se muestran serios, sin gestos y con colores básicos. Retratar con pintura le permite “cambiar los colores de lugar. Por ejemplo, poner el azul en donde debería de ir el rojo, entonces salen los retratados con unos colores extraños en la cara, aunque tienen su lógica dentro del cuadro”.




Fernández de Ceballos (2019), óleo de Franco Aceves Human



Ya que para el entrevistado México es “una veta inagotable de impresentables”, a lo mejor hay una segunda temporada de la serie.

Impresentables nacionales a todo color. 1era temporada permaneció hasta el 11 de agosto en Galería Acapulco 62, Dr. 217, colonia Santa María la Ribera. En el patio/restaurante del local se abrió El Revolcadero.