miércoles, 27 de febrero de 2019

Carlos Torres en el Instituto Cultural de México en París





Merry MacMasters. El Instituto Cultural de México en Francia celebra su 40 aniversario con una exposición retrospectiva de Carlos Torres (Chihuahua, 1949), pintor mexicano que vive y trabaja en París desde 1974. Se trata de medio centenar de obras, entre pintura, piezas tridimensionales como las inmersiones –telas inmersas en cemento cuya mitad queda invisible para siempre, habrá que imaginarla-- , obras sobre madera, dibujos y fotografías, que suman cuatro décadas de creación ya que la pieza más antigua es de 1980.

Egresado de la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado “La Esmeralda”, Torres es de formación figurativa. Aunque ahora se considera no-figurativo o abstracto, asegura que la figuración “siempre me atrae y la practico de vez en cuando”. En la exposición habrá dos piezas figurativas, un homenaje a Vermeer a quien considera “una referencia de la luz y del orden en la composición, así como un retrato que le hizo al artista español Miquel Barceló.






Entrevistado, Torres señala cuando empezó a trabajar en 1974 su trabajo consistió en “una fusión entre fotografías de mi propia cara asociadas a una pintura gestual”. En 1981 montó una exposición en el Museo de Arte Carrillo Gil que vino a cerrar ese periodo. A partir de allí continuó en la exploración de posibilidades hasta llegar a la serie Cache, que consistió en telas con mucho color posteriormente cubiertas con negro dejando visible solo una parte.

Dicha serie inspiró al escritor cubano Severo Sarduy a escribir en 1986 el texto Luz fósil en que dice: “Carlos Torres recorre las secuencias y reconstituye las escenas de esta posible cosmogonía del color, de esta verosímil historia de iris. Ocultar, obturar, tachar, borrar, para recuperar en la mirada el impacto del cromatismo original, la percepción adánica: islas en la luz nueva. No hay acceso frontal, neto, al color, sino vislumbre, intuición, adivinanza casi. Así nos tiende la presencia su jeroglifo, garabato esplendente que escapa, apenas a la furia iconoclasta de lo negro. Y huye, hacia los bordes de la tela”.

Para Torres “no es que un pintor cambie su manera de pintar, sino el trabajo pasa por una serie de evoluciones naturales generadas por la búsqueda y la práctica constante del oficio”. Es de la idea de que “si hay exigencia y rigor, la obra por sí sola, aunque tenga varias expresiones, conserva su coherencia, como en el caso de Gerhard Richter”.

Distinguido en 2006 como Caballero en la orden de Artes y Letras de la República Francesa, Torres también ha dicho que trabaja en dos tiempos: “Primero elaboro una imagen, buscando que tenga plasticidad y coherencia propia. Después la intervengo; recortando. quemando o enterrándola parcialmente. En la primera etapa, ignoro el uso o resulta de final, estoy siempre abierto a la sorpresa y a lo que proponga la obra misma”.

Actualmente Torres experimenta con las posibilidades que ofrece el oro dentro de la pintura. Trabaja en un par de proyectos en Ciudad Juárez y Chihuahua.

La exposición permanecerá hasta el 22 de marzo.

domingo, 17 de febrero de 2019

ZONAMACO 2019


Por segundo año consecutivo ZONAMACO, líder en las ferias de arte contemporáneo en América Latina, fue visitado por más de 62 mil personas a lo largo de los cinco días que duró. Del 6 al 10 de febrero coleccionistas, profesionales del arte y público en general tuvieron la oportunidad de conocer las propuestas de más de 180 expositores provenientes de 22 países.

Zélika García, directora fundadora de ZONAMACO, expresó que este año en particular acudió una gran cantidad de coleccionistas provenientes de Asia, muchos de ellos por vez primera. También se recibieron a más de 50 grupos de museos, “un número sin precedentes”. Para García la feria se ha consolidado a nivel internacional y ha cumplido con el objetivo que se propuso al fundarla: fomentar el coleccionismo en México y a nivel internacional.



Zélika García


En el marco de ZONAMACO se entregan varios premios. El más galardonado resultó ser Iñaki Bonillas (Ciudad de México, 1981), artista representado por la Galería Kurimanzutto. Fue uno de los cuatro acreedores al Premio Tequila 1800 Colección por Diurnos (2018), obra que también recibió el galardón Jsa Arquitectura, destinado a artistas emergentes menores de 40 años representados por galerías presentes en la feria.  

Desde la década de los 90 del siglo pasado, Bonillas ha establecido en su trabajo una relación muy puntual con la fotografía. Afín a la estética y las prácticas conceptuales de los años 70 y 80, Bonillas ha aislado de manera gradual los distintos elementos que constituyen, más que la fotografía misma, el hecho fotográfico (la cámara, la película, el obturador, el revelado, por ejemplo), para después conectarlos con distintos procedimientos no fotográficos.



Imix, de Lorena Ancona


Los otros artistas ganadores del Premio Tequila 1800 Colección fueron Lorena Ancona (Quintana Roo, 1981), representada por Galería Parque, que trabaja con escultura y cerámica, por Imix (2018), obra asociada con la fertilidad y la regularidad de las lluvias por medio del cocodrilo; Mauro Giaconi (Buenos Aires, 1977), representado por Galería Arroniz, por Teoría del conocimiento (2019), realizada con varios elementos como lo son el grafito en polvo, goma de borrar, pigmento y polvo de cochinilla sobre 60 páginas diversas, y el Colectivo Tercerunquinto (fundado en Monterrey en 1996, integrado originalmente por Julio Castro, Gabriel Cázares y Rolando Flores), representado por Galería Proyectos Monclova, por Desmantelamiento y Reinstalación del Escudo Nacional, una obra producida en sitio en 2008, en el marco de la conmemoración de los trágicos acontecimientos en Tlatelolco.

Las obras ganadoras entran a formar parte de la colección de Casa Cuervo. El comité de selección estuvo conformado por Ercilia Gómez Maqueo, Taiyana Pimentel, Viviana Kuri, Magnolia de la Garza y Boris Hirmas.

La marca en cuestión aprovechó la escena de ZONAMACO para presentar la Edición Limitada de Tequila 1800 Milenio, intervenida por el artista plástico Fernando García Correa, quien dejó una muestra de su obra abstracta y posminimalista en cada una de las piezas.
La más reciente edición de la feria de arte contemporáneo y diseño presentó por primera vez un programa de performances.